martes, 29 de enero de 2013



Yo soy un loco que se disloca si no te ve, que va perdido entre tanta gente sin saber que hacer.

viernes, 25 de enero de 2013

El dolor adopta formas diversas: una punzada, una leve molestia… Dolor sin más, el dolor con el que convivimos a diario, pero hay un dolor que no podemos ignorar, un dolor tan enorme que borra todo lo demás, y hace que el mundo se desvanezca, hasta que solo podemos pensar en cuanto daño hemos hecho, como enfrentarnos al dolor depende de nosotros. El dolor hay que anestesiarlo, aguantarlo, aceptarlo, ignorarlo. Para algunos la mejor manera de enfrentarse a el es seguir viviendo.

El dolor solo hay que aguantarlo, esperar a que se vaya por si solo y a que la herida que lo ha causado cicatrice, no hay soluciones ni respuestas sencillas, solo hay que respirar hondo y esperar a que se calme. La mayoría de las veces el dolor puede aliviarse, pero a veces llega cuando menos te lo esperas, te da un golpe bajo y no te deja levantarte. Hay que aprender a aceptar el dolor, porque lo cierto es que nunca te abandona y la vida siempre lo acrecienta.

Si mañana nunca llega.

Hace dos siglos Benjamín Franklin reveló al mundo el secreto de su éxito, nunca dejes para mañana, dijo, lo que puedas hacer hoy. El descubrió la electricidad, la gente debería prestar atención a las cosas que dijo, no se porque siempre posponemos todo pero si tuviera que adivinarlo diría que tiene mucho que ver con el miedo, el miedo al fracaso, el miedo al dolor, el miedo al rechazo. A veces es miedo a tomar una decisión, porque y si te equivocas y si cometes un error sin solución. Sea lo que sea lo que nos da miedo, una cosa es cierta: cuando el dolor de no hacer algo es más insoportable que el miedo a hacerlo es como si cargáramos con un tumor gigante.

El pájaro mas rápido atrapará al gusano, una decisión a tiempo salvará vidas. Quien duda esta perdido, no podemos fingir que no nos lo dijeron, todos hemos odio los proverbios, a los filósofos, a nuestros abuelos advirtiéndonos sobre el tiempo perdido, hemos oído los poetas malditos instándonos a vivir el momento, aunque a veces debemos escucharnos a nosotros mismos. Debemos cometer nuestros propios errores, debemos aprender nuestras propias lecciones, debemos dejar las posibilidades de hoy bajo la alfombra del mañana hasta que no podamos mas, hasta que comprendamos por fin lo que Benjamín Franklin quería decir, que es mejor saber que preguntarse, que despertar es mejor que dormir y que fracasar o cometer un error enorme es mucho mejor que no haberlo intentado.

Tierra De Nadie.

Intimidad es una palabra que significa, aquí están mi corazón y mi alma, pícalos hasta hacer una hamburguesa y disfrútalos, es algo deseado y temido, es difícil vivir con ella, e imposible vivir sin ella. La intimidad también esta ligada a tres cosas en la vida, los parientes, el amor y los compañeros del piso. Hay cosas de las que no puedes escapar y otras que no quieres saber.

Ojala hubiera un reglamento para la intimidad, una guía donde se explique cuando se traspasan los limites, estaría bien saber cuando lo haces, aunque no se si podrías lograrlo, intimas cuando te lo permiten, y sigues mientras te dejan, en cuanto a las normas quizá no haya ninguna, quizá sea uno mismo quien tenga que definirlas.
En algún momento hay que decidirse, los muros no mantienen a los demás fuera, si no a ti dentro. La vida es un caos, somos así. Puedes pasarte la vida levantando muros, o puedes vivirla saltándolos. Aunque hay algunos muros demasiado peligrosos para cruzarlos. Lo único que se, es que si finalmente te aventuras a cruzar las vistas al otro lado son fantásticas.