En la vida estamos en un constante cambio. Cambiamos nuestro cuerpo, nuestras amistades, nos hacemos grandes, nos enamoramos, nos casamos, nos vamos a vivir fuera de casa con alguien que te llena plenamente, vamos cumpliendo más años todavía y recordamos aquellos días donde solo queríamos ser grandes, ponernos unos zapatos de tacón y salir de casa, pero ahora ya no quieres cumplir años, las salidas con tacón ya te han cansado, las ganas de salir se hacen nulas, y solo quieres estar con tu pareja en casa compartiendo días, compartiendo todo ese amor que todavía queda. Un día, el menos esperado, la vida toca a su fin, nos toca irnos, satisfechos o no de todo lo que hemos vivido.